A pesar de llevar tantos ingredientes, es muy rápido de preparar. Es un acompañamiento estupendo para un foie micuit, por ejemplo.
Ingredientes:
250 gr de harina
100 gr de azúcar
1 sobre de azúcar avainillado
1 sobre de levadura royal
250 gr de miel
1/2 cucharadita de café de gengibre en polvo
1/2 cucharadita de café de canela molida
1/2 cucharadita de café de nuez moscada
1 clavo rallado (solo la flor del clavo, no el tallo)
dos vueltas de molinillo de pimienta
2 huevos
10 cl de leche entera
En un bol ponemos todo mezclado: la harina tamizada, la levadura, el azúcar, el azúcar avainillado y todas las especias. Lo mezclamos bien y reservamos.
Calentamos la miel hasta que quede líquida. calentamos también la leche, sin que llegue a hervir. Reservamos las dos cosas.
Volcamos la miel en un bol para que se entibie y enseguida añadimos la mezcla inicial de harina y el resto de ingredientes. Mezclamos bien con una lengua de silicona o una cuchara de madera. Cuando esté bien mezclado, añadimos poco a poco los dos huevos hasta que queden bien integrados y al final añadimos muy poco a poco la leche.
Volcamos todo en un molde que habremos untado de mantequilla y harina. Precalentamos el horno a 160 grados y volcamos la mezcla. Ponemos en el horno a 160 grados durante una hora. Desmoldamos y dejamos enfriar en una rejilla.
Es un excelente acompañamiento para un foie micuit (ver en entrantes sugerencia de presentación de foie con pan de especias).